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Libreta de abastecimiento

Noviembre, 2021

En 1962 fue creada por decreto la Libreta de Abastecimiento en Cuba y, desde entonces, pocos cubanos imaginan el rendimiento alimentario de su hogar sin este documento. Entonces, esta presentaba una canasta básica de alimentos como parte de la economía central y planificada. Si bien, en un comienzo, contaba con un subsidio directo, monetario y de productos de la Unión Soviética, tras la disolución de esta última, el contenido de la libreta se vio drásticamente disminuido. En el paso de los años la libreta continuó perdiendo protagonismo en sus insumos esenciales, por ejemplo, en el 2009 volvió a sufrir un recorte en granos, sal y tubérculos, y un año después se eliminó definitivamente la cuota de cigarros, que pasaron a una venta libre regulada. 

 

Actualmente se contabilizan alrededor de 3 809 000 núcleos familiares inscritos en el sistema de la libreta, agrupando a más de 11 millones de cubanos. Los productos de la libreta son variables según zona geográfica y pueden estar sujetos a errores administrativos, de producción y transporte de sus productos, así como a la disponibilidad real y capacidad de importación del país. A pesar de esto, durante los dos últimos años la libreta ha sido no solamente documento de gestión para la entrega de alimentos normados, sino también para la regulación de donativos y otros productos controlados, pero no subsidiados, dentro de las políticas de emergencia por el COVID-19. Según se ha agravado la crisis económica, los hogares cubanos han vuelto a ser más dependientes de este documento, evidenciándose un incremento en el registro del mismo, como un instrumento de vigilancia y regulación social, así como de normalización de la inseguridad alimentaria.

 

Food Monitor Program realizó entrevistas semi-estructuradas para obtener información sobre las experiencias alimentarias de ciudadanos cubanos en torno a la libreta de abastecimiento, su capacidad adquisitiva, dependencia de subsidios, percepción de bienestar y seguridad alimentaria, trueques y dinámicas de sobrevivencia, entre otros. 

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TODO ES TAN CARO QUE EL SUBSIDIO ES UN ALIVIO

Leandro Fernández*

"Si hay ancianos o niños es imposible sobrevivir sin la libreta ya que la mayor parte del mes hay que comprar los productos por la calle"...

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AQUI SE SACA TODO

Diana Sanchéz*

"Considero que la dieta familiar no puede sobrevivir sin la libreta, al menos, aunque sea ese poquito, unos diítas ayuda"...

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NO HAGO ALMUERZO Y COMIDA COMO ANTES

Gloria Morales*

"Hace faltan los productos de la libreta pues no hay donde conseguir arroz, ni azúcar, ni café, el aceite escasea"..

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TODO LO ADQUIRIMOS DE LA BOLSA NEGRA

Ricardo González*

"El Estado no tiene ni entrega producto liberado alguno, toda la adquisición es en la bolsa negra, lo que encarece así la vida"...

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HE VENDIDO COSAS DE LA CASA PARA COMER

"Para todo hay que enseñar la libreta  porque, además de no poder comprar en cualquier tienda"...

Mireya López*

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NO ME ALCANZA

Yaima Reyes*

"Sólo he tenido acceso una vez a un combo desde el extranjero, por una donación a través de un amigo"...

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