En mi caso siempre ando preparado para hacer una cola, porque hay lo que hay, pero no alcanza para todos.
Siempre ando preparado para hacer una cola
Francisco Verano, cincuenta y cuatro años, vive con su esposa y sobrino en La Habana, es trabajador por cuenta propia (sin licencia), parte de su familia reside en Miami.
¿Cuánto gastas aproximadamente en un mes para garantizar la dieta de tu familia? ¿Cuánto representa de tus ingresos?
Representarían el 90% de mis ingresos los cuales no son estables, quizá 15 mil pesos que están muy lejos de garantizar la dieta, es que también comparto con mi papá, que no vive en la casa, así que te diría que el 90%.
¿Cómo accedes a los alimentos y en qué porciento? (agromercados, organopónicos y ferias, mercado negro, envío de combos del extranjero, compra en tiendas MLC, estímulos laborales, otros)
A veces recibo combos por envío, son variados y resuelven, aunque de calidad cuestionable. Muy caros, eso sí, no bajan de 160 dólares y no alcanzan para el mes. Visito constantemente los agromercados estatales y particulares, esos son caros, pero resuelven bastante. Visito más los particulares que los estatales, estos últimos están bastante desabastecidos, todos con precios por encima del salario mínimo que son unos 2000 pesos cubanos al mes.
El mercado negro antes del COVID-19 era la vía principal para adquirirlo todo, ahora se evita al punto de pasar hambre y necesidad porque es caro en grado extremo. Ha pasado a ser para muchos la última opción, yo busco en el mercado negro todos los meses en un 20%. A las tiendas en MLC, las visito un par de veces al mes con angustia, son muy caras y están desabastecidas de lo fundamental. Así y todo, las encuentras abarrotadas, es engañoso porque lo fundamental es escaso, pero encuentras salsa china, puré de
tomate, mayonesa, pasta de bocaditos. Te hacen creer que tienes opción, pero no es así. Al final te sacrificas para minimizarte con lo que hay y no con y no con lo que quieres, ahí se va la mitad de mis gastos porque adquieres picadillo de res, alguna latica de carne prensada, todo eso con precios que son extremadamente caros, digo yo que son precios de castigo. Por último, no recibo estímulos laborales porque soy como te dije trabajador por cuenta propia.
El mercado negro antes del COVID-19 era la vía principal para adquirirlo todo, ahora se evita al punto de pasar hambre y necesidad porque es caro en grado extremo
Por el desabastecimiento durante el COVID existen unas tiendas que antiguamente eran establecimientos en CUC, que hoy han pasado a estar en moneda nacional (MN), ahí el Estado te asigna algunos productos de primera necesidad que pudieran servir si no los restringieran, te hablo de pollo, salchichas y picadillo normado. Lo dan de manera muy controlada utilizando la libreta de abastecimiento y en cantidades insuficientes. Ahora se pueden visitar esas tiendas para adquirirlos una vez al mes. Empezaron semanal, continuaron quincenal y ahora es una vez al mes, el sacrificio para acceder a los productos debido a las colas es sub-real, pero con las compras en esas tiendas subsiste la mayoría, en mi caso es el 15% de mis gastos.
¿Cuántas horas dedicas a la búsqueda y compra de estos alimentos?
La búsqueda y compra de alimentos es la tarea principal de cualquier cubano, desde los que menos tienen hasta los que más tienen. En mi caso siempre ando preparado para hacer una cola, porque hay lo que hay, pero no alcanza para todos. Casi todos los días hago algo relacionado con la búsqueda de alimentos, no siempre tengo éxito, cuando voy a las tiendas en moneda nacional es casi todo el día, al igual que las en moneda libremente convertible (MLC). En los agromercados inviertes menos tiempo, pero igual se te van un par de horas en ellos.
¿Utilizas las redes sociales para informarte de provisiones y precios en tu localidad, por ejemplo, vía Facebook o grupos de Telegram o Whatsapp?
No, no utilizo las redes para tal fin.
Si tuvieras que dividir tu dieta, ¿cómo describirías tu consumo de proteína animal, vegetal, carbohidratos? Por ejemplo, ¿cuántas veces a la semana consumes pescados, carnes rojas, carnes blancas, productos lácteos, huevos, vegetales?
Casi siempre el pollo de las tiendas reguladas, lo estiras y es como una liga, lo comes casi todos los días. Como tan poco pescado que casi puedo decir que nunca. Carne roja casi igual, el mes pasado compré dos tubos de picadillo de res, muy buena la calidad, en MLC, carísimo, dos comidas para tres personas por tubo. Esa es la carne de res que he comido en los últimos dos o tres meses. A los huevos tengo acceso porque vienen 10 por persona a la bodega mensualmente. Sobre la leche, aquí no se vende leche, solo las dietas médicas, que ya las quitaron hasta nuevo aviso, y embarazadas y niños menores de siete años tienen una asignación de leche. Yo tomo leche cuando la puedo comprar por fuera y es muy muy muy cara. Los vegetales, los encuentras en los agritos particulares [pequeños puestos de agromercado privados] y tienen precio de miedo. La cebolla, el ajo y el tomate solo están al alcance de grandes bolsillos. Quizás lo que más compro es pepino, aguacate…otro tipo de hortalizas no hay.
¿Consideras que tu familia tiene suficiente ingestión de alimentos sanos para su normal desarrollo?
No, para nada, estamos comiendo lo que podemos, cuando podemos, los carbohidratos y el azúcar son los que nos mantienen en pie.
¿Consideras que en tu familia existen enfermedades relacionadas a la escasez de nutrientes o la dieta insana?
Nosotros somos una raza muy fuerte, hasta el pan con escombro nos nutre así que, si estamos enfermos con la escasez de nutrientes, que es casi total, ni lo notamos.
¿Consideras que, a la hora de comprar, debes decidir entre un alimento básico u otro? ¿Consideras que estás adquiriendo los alimentos a un precio justo?
El problema no es que decides entre uno y otro, el problema es que compras el que hay. Nunca he estado en esa disyuntiva porque no existe la variedad. Depende de lo que se entienda por justicia, yo diría que los alimentos están muy por encima del poder adquisitivo, eso pudiera decirse que es injusto
¿Han variado tus preferencias alimenticias durante los últimos dos años? ¿Cómo?
A mí me encanta comer, es el mayor de los placeres desde mi punto de vista, un escalope de cerdo, una riñonada, el cerdo asado y el pollo en salsa con papas, el atún, un buen filete de aguja, las ensaladas mixtas, que no se me deben haber olvidado hacer… el helado, el refresco malta, las golosinas. Pero yo soy un hombre que se adapta desde niño, recuerdo cuando estaba becado que hacía refresco con agua y unos caramelos dentro del recipiente. Ahora no te digo que no me tome una cerveza importada, un Kermato [bebida no alcohólica con base de jugo de tomate, almeja y especias], un refresco gaseado, que no me coma un asadito rico un día, pero es sacrificado [lo pronuncia alto y alargando las sílabas]. A mi me encanta el agua con azúcar, que es malísima, pero me ayuda a mitigar el hambre a veces. A veces como picadillo de pollo que no me gusta, a veces como un poco más de pan, que no está mal para sostenerse, cosa que no me gusta, pero no me queda de otra.
¿Qué productos básicos encuentras únicamente o más a menudo a través del mercado negro?
El mercado negro siempre a jugado un papel fundamental cuando se trata del sustento doméstico, de suministros al sector privado. Incluso suministra hasta la izquierda del sector estatal [se refiere a negocios ilegales dentro del sector estatal, mercados grises]. Pienso que el Estado tiene conocimiento, sabe que el sistema es ineficiente y solo con el buen funcionamiento de ese mercado negro se logra colocar en cada lugar lo que se necesita, dígase en un hogar, dígase en un comercio, dígase en un establecimiento estatal.
El mercado negro siempre a jugado un papel fundamental cuando se trata del sustento doméstico, de suministros al sector privado. Incluso suministra hasta la izquierda del sector estatal
Pienso que hay un gran desabastecimiento en general. Hay varios factores que conspiran: la pandemia, el embargo, y lo más importante la mala función del Estado cubano, las malas políticas estatales. Yo he tenido cafeterías, por ejemplo, y en todo momento funcionaron gracias a ese mercado paralelo y capitalista, que es el mercado subterráneo; si no fuera por él este orden de cosas tal y como las conocemos no existiría, a este gobierno lo sostienen varios pilares y uno de ellos es el mercado negro.
Ahora el mercado negro está debilitado, pero la poca carne de res, leche, yogurt o harina que se consigue es por esa vía; los negocios incluyendo los míos se siguen nutriendo de ahí. Al final, no considero que caigo en una delincuencia inmoral por abastecerme del mercado negro, porque no todo lo legal es justo, ni todo lo ilegal es inmoral.
Lea todas las entrevistas en Food Monitor Program AQUÍ