Ismael, hombre de 43 años, vive con su pareja y su mascota en La Habana.
Frida Project
¿Tienes mascotas en casa?
Sí
¿Qué tipo de mascotas tienes? ¿Desde cuándo convives con ellas?
Tengo una perrita salchicha, Sofía. Vive con nosotros hace 8 años exactamente.
¿Qué come tu mascota? ¿Cuántas veces al día la alimentas?
Sofía tiene una alimentación variada y en principio come de lo que yo me alimento, hace mis mismas comidas, tres al día: desayuno, almuerzo y comida, pero en cantidades diferenciadas.
Básicamente se alimenta de masa y cartílago de pollo, come comida elaborada, le gusta sentir que su comida es cocinada en el día, he probado servirle comida recalentada del día siguiente y no le gusta. Nunca la adaptamos a comida especial para animales porque es difícil de conseguir y sabía que no podría sostenerle esa alimentación.
Con lo que tengo, trato siempre de bajarles las grasas y las sales.
¿Quién se encarga de conseguirle comida?
Yo mismo soy el que hago las compras habituales de comida, y como es mi misma alimentación siempre cuento con ella como uno más en la casa.
¿Cómo valoras el ejercicio de proveer a tu mascota? ¿Ha mejorado o empeorado durante los últimos dos años?
Sin dudas hoy en día alimentar una mascota es difícil producto de la misma escasez, antes ella se comía dos muslos diarios de pollo, hoy día por supuesto no es así, dada la escasez, come las sobras que dejamos y principalmente el cartílago de los huesos que es bien nutritivo. Arroz, potajes, viandas.
Por supuesto que ha decaído su alimentación pero tratamos de sostenerla lo más que podemos. Esta no es la realidad de muchas mascotas, sabemos de muchas que apenas se alimentan, principalmente mascotas de las personas mayores o de familias muy numerosas.
Sabemos de muchas que apenas se alimentan, principalmente mascotas de las personas mayores o de familias muy numerosas.
También conocemos el ejemplo de familias que han tenido que abandonarlas en el Parque Lenin por no poder sostener a sus mascotas.
¿Tuviste mascotas durante los noventa? ¿Cuán diferente era entonces de ahora?
Sí, tuve mascotas en los noventa, pero mis mascotas no eras perritos de raza, más bien saticos que estos llevan también una alimentación variada menos cuidadosa porque son más resistentes, pero igual uno trataba de sostenerlos con lo que se podía, eran momentos muchos más difíciles y corrían la misma suerte de uno. Si había agua con azúcar ellos también cenaban agua con azúcar. La crudeza de los tiempos pintaba un panorama feo para estas mascotas. Pero como te decía perrito sato resiste, jamás pensar en esa época tener un perro de raza, esto hubiera vuelto loca a mi familia.
Sobre la atención médica a los animales, hoy hay más especialistas y se entiende más sobre el cuidado de las mascotas
¿Tuviste animales de crianza en los noventa (pollos, cerdo, conejo, etc.)? ¿Debieron ser sacrificados para el consumo familiar?
¡Ay! Sí, crié dos puercos Peggy y Mamota, en el pequeño patio de mi casa, pero cuando llegó el momento no resistí su final, es muy fuerte porque siempre me encariño con los animales.
Después me dio por criar pollitos que vendían en grupos de 20, al final no podía mantenerlos y terminamos con solo dos, a estos les pusimos el nombre de Fidel y Raúl, para que cuando llegara el momento, hablando de forma sádica, no nos diera tanta pena. Cruda realidad, pero el humor negro siempre ha sobrado en la isla.
Después me dio por criar pollitos que vendían en grupos de 20, al final no podía mantenerlos y terminamos con solo dos, a estos les pusimos el nombre de Fidel y Raúl.
Tengo una amiga que, como yo, criaba pollitos. Durante un invierno de apagones nocturnos ella no pudo ponerles el bombillo habitual que se debía de poner para que sobrevivieran al frio, como alternativa los pegó en una caja de cartón a la cocina o fogón de la casa con baja llama para que recibieran el calor de poco a poco, pero en la madrugada la presión del gas subió y la llama salió con mucha fuerza (muy común que esto sucediera). Cuando amaneció descubrió que la caja en su totalidad se había incendiado y con ella todos los pollitos que estaban dentro. Muchos sucesos como estos ocurrieron en cada casa, algunos tristes otros menos.
¿Por qué se entregaban tantos pollitos en los noventa?
Realmente lo que nos vendían eran pollitos machos (gallitos), en los criaderos normalmente estos pequeños animalitos se separan y llegan a un barril o tanque de agua donde son ahogados, (porque no pueden haber más de dos gallos o uno solo en un gallinero, los machos se sacrifican). Alguien del Partido Comunista debe haber dicho “no los ahoguemos, vendámoslos o entreguémoslos al pueblo para que los intenten criar como puedan”. Para esto no existió una campaña de asesoramiento ni nada al respecto, de allí todos esos sucesos cruentos o traumáticos con relación a los pollitos en la cuidad.
¿Los consideraste en su momento mascotas?
Si, el amor por los animales siempre ha estado en mi familia principalmente en mi madre. Antes sí marcaba más distancia entre ellos, pero hoy me cuesta mucho trabajo separarme de mi Sofía.
¿Qué otras experiencias tuviste sobre la alimentación de animales en convivencia con humanos durante el abastecimiento acentuado en los noventa?
Por ejemplo, con el tema de los gatos, nunca tuve una experiencia personal, pero escuché y compartí experiencias con alguien que sí los probó, comió gatos. La persona que te comento vivía en uno de los edificios de la Radio que están al lado del Hotel Cohiba, esta persona bajaba en las mañanas muy temprano y en la tarde - noche a pescar gatos con anzuelo y vara. En el anzuelo le ponía un pequeño pez y lo lanzaba entre la hierba de los alrededores del edificio, cuando los atrapaba recogía el carrete y los metía en un saco donde luego con un palo les quitaba la vida.
Realmente las historias no son atractivas de contar, muy crueles como de película de terror, y los animalistas sufrirían mucho al escucharlas.
El comentario final es que los gatos tienen supuestamente el mismo sabor que el conejo.
Existían muchos rumores producto de la imaginación y la necesidad, que vinculaban a los animales callejeros, ¿cuál otra conoces de esa época?
Bueno, lo que se escuchaba, que se vendía hígado humano, locuras así. Pero es que no había que poner demasiado a la imaginación… con el tema de los sacrificios religiosos también hay tela por donde cortar. ¡Ah! Y la dieta vegetariana del zoológico. Yo vi los leones comiendo toronja, y los cocodrilos comiendo curieles.
Pero ahora mismo, durante la pandemia, yo personalmente vi hacer una cola gigante para hueso limpio de vaca. Para mi fue risible sobre todo la cantidad de gente que estaba en la cola. ¿Tú sabes lo que es un hueso limpio.. sin carne alguna, sin nada de proteína roja en su alrededor, puro hueso?
¿Cómo dueño de un animal de compañía, que crees que falta en el mercado cubano para la alimentación animal?
Todo.
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