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Sí, la verdad es que el proceso del embarazo en Cuba se vive con mucho estrés,

El embarazo en Cuba se vive con mucho estrés

Rita, mujer de 30 años, residente en La Habana. Maestra de escuela primaria. 

¿Puede describir su estado de salud?

Mi estado de salud es favorable, me considero una persona muy saludable, no tengo malos hábitos y siempre he cuidado de mi salud física mediante ejercicios. Actualmente estoy embarazada con 38 semanas de gestación. 

¿Qué periodo de tiempo lleva presentando este estado?

 

Debuté con una diabetes gestacional, a las 16 semanas de embarazo. Actualmente estoy a término.  

¿Su estado se ha visto potenciado o agravado por las condiciones de alimentación? ¿Puede describirnos en qué sentido o forma?

Sí, durante el embarazo he tenido dificultades para mantener un peso adecuado, hemoglobina, alimentación en general. A partir de la detección de la diabetes todo se complicó muchísimo más, los productos que necesito no solo están caros, sino que en ocasiones no aparecen, aun con el dinero en mano.

¿Necesita alguna alimentación específica por su condición? ¿Cuál? 

Sí, realmente no puedo controlar mi estado con medicamentos, así que básicamente depende todo de mi dieta. Necesito leche, que, aunque me asignaron una cantidad por dieta, me la entregan a fin de mes, casi siempre y no alcanza, a falta de otros alimentos debo consumir leche, un kilogramo al mes no es suficiente. Esta el tema del yogurt, que también es importante, la bolsa por la calle está a mas 100 pesos, cuando a eso le sumas la carne que necesitas, frutas, vegetales, se te va la vida en alimentarte, nada más. 

¿Esta alimentación representa un costo adicional en sus gastos de alimentación? ¿Qué formas o canales alternativos utiliza para “resolverla”?

La mayoría de los productos que necesito para alimentarme los tengo que buscar en las tiendas de moneda libremente convertible o el mercado negro, las dos vías son sumamente caras.

¿Esta alimentación necesita de ejercicios adicionales en su elaboración que pudiera describir?

Sí, alimentos bajos en grasas, poca sal, es importante tener en cuenta que durante el embarazo hay que cuidar también los riesgos de hipertensión.

¿Qué alimentos normados (de la libreta) recibe para cubrir las necesidades de su condición?

Leche por dieta, una lb de pollo. A las embarazadas nos dan dietas especiales que se renuevan cada trimestre, sin embargo, a mí me la dieron completa, sin necesidad de renovarla, porque como los alimentos de la dieta no están entrando, no hay necesidad de renovar

 

¿Considera que tiene acceso a lo necesario para cubrir una dieta balanceada según las necesidades de su condición? En su defecto, ¿qué productos considera indispensables para su dieta y le son difíciles de adquirir? 

No, durante el embarazo no he podido comer, por ejemplo, pescado, o carne de res, algunos hasta me han recomendado la carne de caballo, que es muy buena para la hemoglobina, pero que aquí es ilegal. Tampoco he podido consumir lácteos, o lentejas, por ejemplo. 

¿Padece de ansiedad o preocupación por el suministro de alimentos necesarios para su salud?

Sí, la verdad es que el proceso del embarazo en Cuba se vive con mucho estrés, aunque por la parte genética todo va bien, existe mucha presión por parte de los médicos de la familia. Alimentarse es primordial, en Cuba la 

cuestión de los alimentos cada vez es peor, vivimos a pollo, picadillo y perritos, nada más. Imagínate mantener un embarazo saludable con esa dieta. En el mercado negro las cosas aumentan de precio de un día para el otro, y a veces las cuentas no dan, hay que inventar para poder llevarse un plato de comida a la boca. 

 En el mercado negro las cosas aumentan de precio de un día para el otro, y a veces las cuentas no dan, hay que inventar para poder llevarse un plato de comida a la boca. 

¿Ha limitado la calidad o la cantidad de los alimentos en beneficio de otro miembro familiar, a su consideración, más vulnerable?

No, yo he podido comer lo que necesito, pero por ejemplo mi mama si ha dejado de comer algunas cosas por guardarlas para mí, o mi esposo, la prioridad a la hora de alimentarse soy yo y el bebé. A veces me siento mal por eso, porque ellos están trabajando y también necesitan alimentarse bien. 

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